Esto se podría traducir como “el vestido al basurero” y se trata principalmente de utilizar tu vestido después de la boda. ¿Utilizarlo como? pues nada menos que en hermosas composiciones fotográfica de los novios después de terminada la boda, una vez de regreso de la Luna de Miel y cuando ya todo está más tranquilo y relajado.
Es cierto que en el día de la boda se tomaron una infinidad de fotografías. Solos, con los padres, con los hermanos, los amigos, en fin… las clásicas fotos que conforman tu álbum de bodas. Muchas de esas fotos se toman con los invitados y los novios muy nerviosos, otras de prisa y las más con cansancio luego de tanto preparativo y expectación de que todo salga bien ese día. Son fotos bellas en el lugar del evento donde todo está decorado y preparado para TU día. Pero ¿Qué tal si te hicieras unas fotos maravillosas en un bosque o bajo un viejo puente o en algún lugar que a ustedes les trae lindos recuerdos, por ejemplo el parque donde se conocieron?.
Bueno de eso justamente se trata el “Trash the dress”: coordinar con tu fotógrafo un día en especial en el lugar que hayan elegido, te vuelves a poner tu vestido de novia, te maquillas, te peinas, te arreglas tal cual si te fueses a casar nuevamente. El que ya es tu marido, hace lo mismo y comienza la sesión fotográfica donde te podrás hacer fotos espectaculares en los más lindos paisajes, con tu vestido impecable, tu maquillaje fresco y con todo el tiempo del mundo solo para ti y tu esposo en esta relajada sesión.
Si piensas en unas fotos artísticas con el vestido y el traje que podrán enseñar a todos tus amigos en tu web de novios y guardar durante años en su álbum de boda, entonces este método es el ideal para realizar las mejores fotos aprovechando al máximo esta sesión fotográfica.
En este tipo de sesión tendrán, los ya marido y mujer, mucha más libertad para hacer fotografías de bodas creativas y artísticas poniendo toda la atención en buscar localizaciones interesantes y fotos sorprendentes. Por esta razón se llama “Trash the dress” en relación con el vestido de la boda, que no se volverá a utilizar y que se puede exponer a la aventura, sin miedo que se manche o estropee. Es una expresión que se ha adoptado de los fotógrafos de boda americanos que la utilizan en su sentido más literal.
Conversa con tu fotógrafo sobre este tema, será algo novedoso, inolvidable y dale pie a esta nueva tendencia que ya se viene fuerte. Sean ustedes unos de los primeros en aplicarla. No se arrepentirán.
Esto se podría traducir como “el vestido al basurero” y se trata principalmente de utilizar tu vestido después de la boda. ¿Utilizarlo como? pues nada menos que en hermosas composiciones fotográfica de los novios después de terminada la boda, una vez de regreso de la Luna de Miel y cuando ya todo está más tranquilo y relajado.