Era una asignatura pendiente en el sector de los eventos corporativos que las empresas de catering se unieran para trabajar en la defensa de los intereses de unos profesionales cuyo servicio al cliente es su objetivo fundamental.
Hace unos meses se juntaron los responsables de las principales empresas y pusieron en común una serie de inquietudes que les preocupan y que les gustaría compartir entre otros profesionales del sector: el asesoramiento legal necesario para la actividad, la defensa de los intereses generales de los catering, la salvaguarda efectiva ante el intrusismo y la competencia desleal, el apoyo y fomento de la labor de perfeccionamiento de las empresas asociadas, la negociación de acuerdos o relacionado con la actividad representada, la organización de acciones de carácter formativo y cultural que redunde en el beneficio de los asociados, y la gestión de convenios que afecten e interesen a sus miembros.
Durante estos meses en la Asociación hemos gestionado procedimientos para reactivarnos, para superar la situación, para adaptarnos a las nuevas situaciones. Hemos trabajando en grupos para definir cómo gestionar el cliente de empresa, los servicios en el mercado de bodas, cómo mejorar el servicio para que los asistentes y empleados se sientan más seguros. Hemos demostrado nuestro compromiso social y empresarial para que esta situación mejore, se reactive y sigamos adelante.
Hemos hecho un resumen de actividad del 2020 entre nuestros socios y el resultado es el siguiente: la caída de facturación y ventas a septiembre es del 72,22 % respecto al año pasado, la previsión de bajada de facturación a final de año es del 75,23 %, el descenso en el número de servicios de catering realizados al mes de septiembre respecto a 2019 es del 69,21 %, el número de asistentes a los eventos es un 51,13 % respecto al año pasado, el beneficio previsto para final de año es un 74,78 % menor que el año pasado, y el porcentaje de empleados en ERTE actualmente es del 62 %.
Con estos números es clara la situación que estamos viviendo las empresas de catering. Se siguen haciendo servicios, seguimos cumpliendo nuestro compromiso, pero las circunstancias nos impiden trabajar al nivel que nos gustaría. Necesitamos ayudas y que nuestras reivindicaciones sean escuchadas.
En general, los eventos se han visto afectados todos en mayor o menor medida. Eventos sociales hemos podido hacer algunos, pero el gran perjudicado, sin duda, ha sido y es el evento presencial corporativo que prácticamente ha desaparecido. En este sentido, nos gustaría animar a todos a que hagan eventos. Tenemos limitaciones, sí, pero todos los actores de un evento y los catering profesionales somos uno muy importante, tenemos protocolos seguros de actuación certificados y con medidas por encima de las marcadas por las autoridades sanitarias.
Un evento es uno de los sitios donde se controla de manera más rigurosa que los protocolos frente a la Covid se cumplan y se respeten por parte de todos, organizadores y asistentes. Los datos demuestran que en eventos la notificación de contagios está siendo prácticamente inexistente.
En la Asociación Empresarial de Catering (AEC) defendemos a nuestros socios que han implantado las medidas oportunas de servicio adaptadas a la situación actual. Las noticias que se difunden en los medios son difíciles de asimilar para las empresas de catering ya que afectan de manera directa en su actividad.
Necesitamos que la actividad social y empresarial se reactive. Las personas nos tenemos que volver a reunir, a asistir a eventos, a compartir, y a realizar networking con las medidas de seguridad oportunas. Pero los eventos seguros son posibles y las empresas de catering lo hemos demostrado.
La organización de un evento y el servicio de catering correspondiente es una gestión segura aplicando todas las medidas y recomendaciones. Las empresas de catering damos garantías de seguridad para asistentes y empleados.
Hemos invertido en nuevos formatos, hemos creado un sello de calidad de la propia Asociación, aplicamos un control a los asistentes, hemos adoptado medidas de higiene, somos conscientes de lo importante que es la distancia social, aplicamos las limitaciones de aforo interiores y exteriores, y hemos sido los primeros en adoptar protocolos.
Las empresas asociadas quieren impulsar una autorregulación de las pautas de conducta del sector a través de un código que aporte un valor diferencial de ética y transparencia respecto a las firmas no miembros de la Asociación.
El objetivo de esta gestión es que la pertenencia a AEC garantice que la empresa asociada cumple con los estándares más exigentes del mercado, conforme a lo solicitado en los concursos organizados por compañías e instituciones, teniendo siempre como finalidad la excelencia en el servicio y nuestro “sello de calidad de AEC”.
